ISSN: 2155-9600
Rachael M Thomas, Edward Meadors, Caroline Pilgrim, Hannah Johnson, Maria Smith, David C Ianuzzo y Richard C Baybutt
Existe una relación inversa significativa entre el colesterol de lipoproteínas de alta densidad (HDL-C) y los eventos cardiovasculares. Estudios previos informaron un aumento de HDL-C en respuesta a 4 semanas de dosis farmacológicas de ácidos grasos omega-3 (n-3 FA) (3-5 g/día). Nuestra hipótesis fue que una dosis baja de n-3 FA (ácido eicosapentaenoico y docosahexaenoico), que se puede lograr en la dieta, ingerida en forma de una cápsula de aceite de pescado tres veces al día por hombres de mediana edad y universitarios, durante un un período corto de 2 semanas, precedido y seguido de una sola sesión de ejercicio, aumentaría los niveles de HDL-C. Determinamos el perfil de lípidos séricos (triglicéridos, VLDL-C, LDL-C, HDL-C, colesterol total) en respuesta a una sola sesión de ejercicio (60 min, 55-60% FCmax) después de consumir una dosis baja de 0,9 g n -3 FA/día durante 14 días en ocho hombres de mediana edad (edad 48,9 ± 1,4) y siete hombres en edad universitaria (edad 21 ± 2,5). No hubo cambios significativos en los lípidos sanguíneos excepto en el HDL-C. En hombres de mediana edad y universitarios, el HDL-C aumentó significativamente (P<0,005). La relación TC/HDL-C de los hombres en edad universitaria aumentó significativamente (P<0,05). Nuestros hallazgos sugieren que dos semanas de ingesta de dosis dietéticas alcanzables de n-3 FA seguidas de una sola sesión de ejercicio aumentan el HDL-C, lo que se asocia con una disminución del riesgo de enfermedad coronaria (CHD).