ISSN: 2155-9600
Gordillo-Bastidas E, Díaz-Rizzolo DA, Roura E, Massanés T y Gomis R
Chenopodium quinoa Willd, conocida como quinua, ha sido cultivada y consumido por los humanos durante los últimos 5.000-7.000 años. La quinua fue importante para las civilizaciones andinas precolombinas, ya que los incas la consideraban un regalo de sus dioses. La quinua tiene beneficios potenciales para la salud y un valor nutricional excepcional: una alta concentración de proteínas (todos los aminoácidos esenciales son altamente biodisponibles), ácidos grasos insaturados, un índice glucémico bajo; vitaminas, minerales y otros compuestos beneficiosos; también es libre de gluten; además, la quinua es un alimento sostenible, ya que las plantas presentan una huella alimentaria de carbono y agua entre 30 y 60 veces inferior a la de la carne de vacuno. La quinua es fácil de cocinar, tiene versatilidad en la preparación y se puede cultivar en diferentes ambientes. Por estas razones, la quinua, antes considerada un alimento de bajo prestigio social, es ahora el foco de atención de muchos países a nivel mundial. Sin embargo, existen pocos estudios sobre la quinua o compuestos de quinua, in vitro, in vivo y ensayos clínicos, para evaluar sus posibles aplicaciones clínicas respaldadas por evidencia científica sólida; por lo tanto, existe la necesidad de ensayos clínicos bien diseñados y una mayor investigación científica en este campo.