ISSN: 2329-9509
Kun-Hsi Liao
Antecedentes: la fuerza de agarre manual (HGS) y la fuerza de control del agarre (GCS) son dos predictores de la función de las extremidades superiores para realizar actividades de la vida diaria. Numerosos estudios han indicado que el tamaño de la mano y el diámetro del mango afectan de forma independiente a HGS. Sin embargo, ninguno ha explorado los efectos de hacer coincidir el tamaño de la mano con la amplitud de agarre óptima en los resultados ergonómicos. El objetivo de este artículo fue investigar las relaciones entre la fuerza de agarre, el tamaño de la mano y la extensión del agarre.
Métodos: Setenta y dos adultos sanos (rango de edad de 18 a 30 años) se dividieron en tres grupos de tamaño de mano (pequeño 23, mediano 25 y grande 24) y evaluaron sus datos HGS y GCS tres veces en ambas manos. El tamaño de la mano se midió desde la base de la mano hasta la punta del dedo medio y se ejecutaron tres tramos de agarre diferentes (47,6, 60,3 y 73,0 mm).
Resultados: Los resultados indicaron que el tamaño de la mano individual se correlacionó positivamente con la HGS máxima en ambas manos (p<0,01), pero no afectó significativamente a la GCS (p>0,05). El análisis de varianza demostró una diferencia claramente significativa en HGS para hombres, no para mujeres, en los tres grupos de tamaño de mano. Para los participantes en los tres grupos de diferentes tamaños de manos, un espacio de agarre de 47,6 mm ejercería el máximo HGS.
Conclusión: la fuerza de prensión de la mano se vio influida por el tamaño de la mano y la amplitud de prensión en ambas manos. Existe un intervalo de agarre óptimo al que se debe ajustar el dinamómetro cuando se mide la fuerza de agarre de la mano en personas. Estos hallazgos pueden guiar a los médicos de terapia ocupacional y al personal a diseñar intervenciones ergonómicas.