ISSN: 2329-8901
Akbar Nikkhah
Este artículo desarrolla una estrategia pragmática innovadora para mejorar la salud y la fisiología intestinal mediante la optimización del ritmo circadiano del consumo de frutas y verduras. Se recomienda estimular la dinámica intestinal probiótica con el consumo de frutas seleccionadas al comienzo de la fase de actividad (es decir, temprano en la mañana) complementado con el consumo de vegetales y frutas adicionales al comienzo de la fase de inactividad (es decir, al anochecer y durante la noche). Esto permitirá que el intestino mantenga su fisiología eficiente durante el momento más estresante del día y minimice los riesgos del consumo excesivo de energía y las comorbilidades metabólicas relacionadas.