ISSN: 2157-7048
Juan Carlos Arévalo Pérez, José Gilberto Torres, Adrián Cervantes Uribe, Hermicenda Pérez Vidal, Adrián Cordero García, Armando Izquierdo Colorado, Adib Abiu Silahua Pavón and Wilfrido Miguel Contreras Sánchez< /p>
Los iones de Sm3+, Eu3+ y Gd3+ se depositaron sobre la superficie de TiO2-P25 utilizando un método de impregnación, y los catalizadores se calcinaron a 500 °C para para proporcionar estabilidad térmica a las fases cristalinas. Se procesó una muestra de P25 puro en las mismas condiciones de síntesis. Los materiales se caracterizaron por fisisorción de N2, difracción de rayos X y Microscopía Electrónica de Barrido y Espectroscopía UV-Vis con reflectancia difusa. Se observó por MEB que P25 presentaba una superficie amorfa formando agregados irregulares y deformaciones en los que se insertaban los iones lantánidos estudiados. Debido al tratamiento térmico, el P25 sufrió modificaciones que mostraron una mayor actividad fotocatalítica en la región visible, por la presencia de vacantes de oxígeno generadas por la remoción de impurezas (C y Cl). Los análisis XRD determinaron la distribución y el tamaño de los cristales de las fases cristalinas presentes en el P25 (anatasa y rutilo). Los iones lantánidos posiblemente demostraron un efecto de coalescencia superficial en la fase de rutilo del P25. Se utilizó un diseño experimental completamente aleatorizado para determinar la evaluación catalítica y se demostró estadísticamente que la luz solar es la mejor condición para la degradación y mineralización del diurón. La comparación de tratamientos indicó una mejor opción: usar el catalizador con 0,3 % en peso de Gd bajo la luz solar.