ISSN: 2161-0932
Yuriko Yamamoto, Osamu Chaki y Masaki Nakayama
El diagnóstico de linfoma uterino es un desafío debido a su rareza y presentación inespecífica. El tratamiento también es difícil ya que no existe un tratamiento estándar. Presentamos nuestra experiencia con dos casos de linfoma de útero. El primer paciente era un hombre de 66 años que se quejaba principalmente de dolor abdominal bajo. Fue diagnosticada de linfoma de útero por laparotomía. La quimioterapia fracasó y murió en el transcurso de un año. El segundo paciente era un hombre de 63 años que se presentó con fatiga general. La biopsia de tejido y la tomografía computarizada revelaron un linfoma del estómago con múltiples metástasis, incluido el útero. Fue tratada con quimioterapia seguida de radioterapia, pero murió 18 meses después. El linfoma que afecta al útero es raro y el diagnóstico puede ser difícil. Los médicos deben ser conscientes de esta rara enfermedad para un diagnóstico rápido. El tratamiento debe individualizarse según el estado de cada paciente.