ISSN: 2167-0277
Alethea N Hill, Natasha J Williams, Idoko Salifu, Chimene Castor, Jenna Gibilaro, Samy I McFarlane y Girardin Jean-Louis
Antecedentes: La evidencia vincula las duraciones aberrantes del sueño con niveles elevados de colesterol sérico o hipercolesterolemia (HC), un factor de riesgo de enfermedad coronaria (CHD). Pocos estudios han evaluado la relación entre los indicadores sociodemográficos clave, incluidos el género y la raza/etnicidad y HC.
Métodos: Un total de 40 679 estadounidenses que participaron en la Encuesta nacional de entrevistas de salud (NHIS) de 2008-2009 proporcionaron datos para este análisis transversal. Los participantes fueron reclutados mediante una encuesta de entrevistas de hogares transversal representativa a nivel nacional, que utiliza un diseño de probabilidad de área de etapas múltiples. Los participantes proporcionaron información sociodemográfica, condiciones crónicas diagnosticadas por médicos y duración habitual del sueño, categorizadas como <6 horas u >8 horas, con referencia a 7 horas. Utilizamos pesos proporcionados por NHIS para ajustar el uso de un diseño complejo.
Resultados: De la muestra total (n=40,679), el 85 % informó su raza/origen étnico como blanco no hispano y el 15 % como negro no hispano; El 56% de los participantes eran mujeres. Los análisis de regresión logística ajustados mostraron una asociación significativa entre la duración del sueño y la presencia de HC entre los negros, pero no entre los blancos. Los negros que reportaron duraciones de sueño cortas (<6 horas) o largas (>8 horas) tenían un mayor riesgo de HC en relación con los negros que dormían 7 horas habitualmente [OR = 1,12, IC del 95%: 1,11-1,13; OR=1,13, IC 95%: 1,12-1,14; p<0,001, respectivamente]. Las mujeres negras que informaron una duración del sueño corta o larga tenían un mayor riesgo de informar HC en comparación con los hombres negros que dormían 7 horas [OR = 1,11, IC del 95 %: 1,10-1,11; OR=1,10, IC 95%: 1,10-1,10; p<0.001, respectivamente].
Conclusión: Nuestro estudio respalda la relación entre el sueño inadecuado y los factores de riesgo tradicionales para la cardiopatía coronaria, a saber, HC. Las futuras intervenciones en el estilo de vida deben considerar el papel del sueño para abordar el riesgo de cardiopatía coronaria y la morbilidad por cardiopatía coronaria.