ISSN: 2167-7700
Yuh Baba y Yasumasa Kato
La angiogénesis es un paso crucial en el crecimiento del tumor y la metástasis. La asociación clínica de la vascularización del tumor con la agresividad del tumor se ha demostrado claramente en una amplia variedad de tipos de tumores, incluido el carcinoma de células escamosas de cabeza y cuello (HNSCC) [1]. Por lo tanto, la determinación de la densidad de microvasos en el tejido tumoral puede ser útil para estimar el pronóstico. La inhibición de la angiogénesis puede reprimir la tasa de crecimiento de las células tumorales y también inducir la apoptosis debido a la reducción de la nutrición y el suministro de oxígeno a los tumores. El factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF), que es un elemento importante para muchos procesos angiogénicos, se une al receptor de VEGF (VEGFR) para estimular la proliferación y migración de células endoteliales [2,3]. Por lo tanto, la determinación de la densidad de microvasos en el tejido tumoral puede ser útil como factor predictivo de la efectividad de bevacizumab en estrategias quimiorradioterapéuticas.