ISSN: 2161-1068
Mustafa AS
El control mundial de la tuberculosis (TB) requiere pruebas asequibles y fáciles de aplicar que puedan diagnosticar la TB activa/latente y diferenciarse de la vacunación con Mycobacterium bovis Bacillus Calmette Guerin (BCG), y exposición a micobacterias ambientales. La prueba utilizada actualmente para el diagnóstico de TB es la prueba cutánea de tuberculina administrada in vivo que induce respuestas cutáneas de hipersensibilidad de tipo retardado (DTH) en individuos infectados con M. tuberculosis. Sin embargo, esta prueba carece de sensibilidad y especificidad debido a la naturaleza no estandarizada y de reactividad cruzada de los antígenos utilizados, es decir, el derivado proteico purificado (PPD) de M. tuberculosis. Dado que PPD contiene antígenos compartidos entre M. tuberculosis, BCG y micobacterias ambientales, no puede diferenciar entre infección por M. tuberculosis, vacunación con BCG y exposición a micobacterias ambientales. Para superar los problemas asociados con la PPD, existe la necesidad de identificar antígenos específicos de M. tuberculosis como nuevas tuberculinas para aplicaciones de diagnóstico in vivo en humanos.