ISSN: 2332-0915
Rienda Mildred*
Todos estamos familiarizados con los peligros menores que ha causado el rápido aumento de la tecnología: comprar ropa en Internet sin probárnosla, comprar productos electrónicos y electrodomésticos en línea sin verlos, relaciones personales a través de redes sociales impersonales, etc. Pero en lo que rara vez pensamos es en cómo la tecnología ha distorsionado la búsqueda del conocimiento.