roberto mesas
El objetivo del estudio fue investigar cualquier correlación entre la sensación táctil y las condiciones de carga oclusal de premolares y molares mandibulares, mediante el umbral de detección táctil (TDT). Los TDT de premolares y molares mandibulares de veinte adultos se determinaron mediante monofilamentos calibrados. La fuerza oclusal (OF) aplicada en cada diente en el momento de máxima tensión se midió mediante una película sensible a la presión. No hubo correlación entre los TDT medios y los OF totales de los participantes individuales ni en cada tipo de diente. Los TDT de los dientes del lado preferido para masticar fueron significativamente más altos que los del lado contralateral. Los resultados sugieren que la sensación periodontal está más relacionada con la frecuencia que con la magnitud de la carga. Los mecanorreceptores periodontales de dientes cargados reciben características de fuerzas temporales, espaciales e intensivas. Estas características contribuyen al control eficiente del movimiento mandibular durante la masticación [1-4]. Oki et al. [5] informó que el umbral mecano-sensible de la sensación periodontal después de la carga mecánica transitoria fue más alto que antes de la carga. También revelaron que el umbral mecano-sensible en el grupo de bruxismo habitual era más alto que en el grupo sin bruxismo [6]. Recientemente, se detectó un umbral táctil interoclusal significativamente más bajo en la región molar en bruxistas, en comparación con los no bruxólogos [7]. Estos resultados subrayan una relación entre la sensación periodontal y la carga oclusal. Clínicamente, las alteraciones sensoriales oclusales pueden estar relacionadas con diversas disfunciones orales. Una de ellas, denominada "disestesia oclusal", es decir, caracterizada por síntomas de sensaciones incómodas de oclusión, a pesar de la ausencia de cualquier anomalía o discrepancia oclusal observable, ha sido motivo de preocupación en la clínica [8, 9]. Hasta ahora, el mecanismo aún no se ha desentrañado. El propósito de este estudio fue investigar la relación entre la sensación periodontal en premolares y molares mandibulares, a través del umbral de detección táctil (TDT) y la fuerza oclusal (OF) considerando el tipo de diente y el lado masticatorio preferido (PCS). La hipótesis a probar es que la TDT está influenciada por la condición de carga oclusal. Veinte voluntarios varones con dentición completa natural (edad 26,7 ± 1,5 años) y con función mandibular normal dieron su consentimiento informado para participar en el estudio. Se excluyeron los pacientes con una parafunción habitual, como bruxismo, cualquier antecedente de tratamiento de ortodoncia y cualquier maloclusión evidente. Se estudiaron premolares y molares mandibulares de ambos lados (p. ej., se incluyó una sensación táctil y condición de carga oclusal de premolares y molares mandibulares Roberto Mesas Ciudad de Cardoba, Provincia de Cardoba. Argentina total de 20 × 8 = 160 dientes). El protocolo de investigación fue revisado y aprobado por el Comité de Ética de Investigación de la Facultad de Odontología de la Universidad de Tohoku. El TDT de cada diente se midió mediante monofilamentos calibrados (Touch Test®, North Coast Medical, CA, EE. UU.) con 20 diámetros diferentes correspondientes a 20 fuerzas objetivo (0,008-300 g) [10]. La estimulación táctil se aplicó perpendicularmente al eje del diente en la superficie bucal. La secuencia de dientes probados fue aleatoria. La TDT se determinó por el método psicofísico (método de los límites) [1]. Después de varias series alternadas de pruebas ascendentes y descendentes, el valor medio de los umbrales detectados se consideró como el TDT del diente probado. La fuerza oclusal de apriete voluntario máximo en la posición intercuspídea se midió con una película sensible a la presión (Dental Prescale 50H, Fuji Film, Tokio, Japón) y se calculó mediante un dispositivo de análisis (Occluser 705FRD, GC, Tokio, Japón). La medición de OF se llevó a cabo después de la prueba TDT. La identidad de cada diente correspondiente al valor OF se cotejó mediante una mordida de control de silicona (Flexicon, GC, Tokio, Japón). El PCS se determinó colocando la mitad de un rollo de algodón en el centro de la lengua y observando la dirección en la que se movió el rollo de algodón durante el primer ciclo de masticación.