ISSN: 2593-9173
Kamau NJ, Margret WN y Hillary BK
El acceso desigual a información adecuada y suficiente ha sido reconocido como un impedimento importante para la comercialización agrícola de los pequeños propietarios en la mayor parte del África subsahariana. Los estudios teóricos y empíricos en economía y sociología argumentan que las redes sociales son la fuente de información más persuasiva sobre nuevos productos y recursos, pero los gobiernos de los países en desarrollo continúan confiando en los extensionistas para comunicarse con los agricultores sobre nuevas tecnologías. Se ha utilizado la metodología de análisis de redes sociales (SNA) para representar la estructura de las interacciones sociales entre los pequeños productores de banano en Murang’a. Estas son decisiones tales como dónde obtener materiales de siembra híbridos, mejores prácticas de manejo de campo, cuándo cosechar, dónde vender y a qué precio vender la producción. El supuesto clave es que las redes formadas a través de interacciones sociales tienen beneficios cuantificables para el hogar participante y conducen directa o indirectamente a un mayor nivel de bienestar. Las redes sociales son formas importantes de capital social dado que es un recurso que se encuentra en las relaciones personales que mantienen los hogares en la red y que puede influir en las decisiones de producción y los resultados económicos. Los resultados del estudio revelaron que muy pocos (11,43%) agricultores obtuvieron información sobre materiales de siembra de banano de cultivo de tejidos, o sobre el mercado, directamente de los extensionistas agrícolas. El estudio reveló que hay actores en la red que son cruciales en la difusión de información y recursos. Esto se indica mediante varios grados de centralidad en la red. El predominio de estas redes sociales tiene un impacto sostenible en la complementación de los servicios de extensión en las zonas rurales, por lo tanto, mejora la productividad y el bienestar de los hogares y la sociedad en general.