ISSN: 2161-0932
Miranda VA, Pohlhammer DS, Vigueras S, Cuello MA
El uso de morcelación eléctrica eléctrica en cirugía ginecológica puede aumentar el riesgo de diseminación y recurrencia, así como un impacto negativo en la supervivencia libre de progresión en pacientes en las que en la biopsia se diagnostica incidentalmente un sarcoma.
Revisamos nuestros datos sobre el uso de morcelación eléctrica en nuestro hospital, entre mayo de 2007 y mayo de 2014. En ese período se realizaron un total de 249 cirugías que requirieron morcelación. Todos los casos se sometieron a una discusión de revisión por pares antes de asignar el abordaje quirúrgico. No se encontró sarcoma en las biopsias; tampoco ningún tipo de cáncer de endometrio o de cuello uterino. Aquellos casos sospechosos de malignidad fueron descartados de utilizar morcelación. En cuatro de esos casos, el informe patológico final confirmó un sarcoma uterino.
Por lo tanto, si los pacientes se seleccionan bien en función de un análisis de revisión por pares oportuno, la morcelación eléctrica se convierte en una herramienta útil y segura para la cirugía mínimamente invasiva.