ISSN: 2167-0420
Bekana Fekecha Hurissa, Mathewos Geta y Tefera Belachew
Antecedentes: La inducción del trabajo de parto es un procedimiento obstétrico que se realiza cada vez más en todo el mundo. Se lleva a cabo en aproximadamente el 20% de todos los embarazos. Se asocia con peores resultados en comparación con el trabajo de parto espontáneo.
Método: Se realizó un estudio transversal de base institucional en los registros médicos de 294 mujeres admitidas para la inducción del parto en los centros de salud pública de Hawassa desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre de 2014. Se utilizó una técnica de muestreo sistemático para seleccionar las muestras. . Los datos se recopilaron mediante un cuestionario estructurado y se editaron, luego se ingresaron en Epi-Data versión 3.1. Los datos se analizaron con Statistical Package for Social Science, versión 21. Primero se calcularon el porcentaje, la frecuencia y la media. Luego, se realizó un análisis de regresión logística multivariable para evaluar la posible asociación de todas las variables que eran candidatas después del análisis de regresión logística binaria. Se consideró estadísticamente significativo un valor de p inferior a 0,05 en la regresión logística multivariable. Finalmente, el resultado se resume y presenta en textos y gráficos.
Resultado: La prevalencia de inducción fallida del trabajo de parto fue del 17,3 %. El análisis de regresión logística multivariable mostró que edad materna avanzada [AOR 9.21 (2.70-31.35)], nuliparidad [AOR 3.11 (1.01-9.62)], puntuación de Bishop pobre [AOR 4.54 (1.56-13.19)], mayor para gestación [AOR 6.57 ( 2.18-19.72)], malos antecedentes obstétricos [AOR 5.60 (1.35-23.29)], post término [AOR=4.52 (1.20-17.00)] y rapto prematuro de membrana [AOR 5.66 (1.96-16.32)] se asociaron significativamente con fracaso inducción del parto.
Conclusión: La edad avanzada, la Primiparidad, la puntuación Bishop desfavorable, la rotura prematura de membranas, mayor para la gestación y los malos antecedentes obstétricos tuvieron una asociación positiva con la inducción fallida del trabajo de parto. El desarrollo de pautas de práctica puede ayudar a prevenir la selección injustificada de casos y ayudar a reducir las altas tasas de fracaso actuales.