ISSN: 2155-6148
Emyedu A*, Atumanya P, Okello E, Wabule A, Ssemogerere L, Mukisa J,
Antecedentes: El bloqueo neuromuscular residual es un impedimento importante para el uso de fármacos bloqueadores neuromusculares durante la anestesia general. Se asocia con eventos respiratorios agudos potencialmente fatales como obstrucción de las vías respiratorias superiores, aspiración, hipoxia y atelectasia. En este estudio nos propusimos determinar la prevalencia y las complicaciones del bloqueo neuromuscular residual en nuestro medio.
Métodos: realizamos un estudio de cohortes prospectivo multicéntrico en tres hospitales de referencia en Uganda desde junio de 2019 hasta marzo de 2020. Reclutamos a 485 pacientes adultos ingresados en la PACU que habían recibido un bloqueo neuromuscular no despolarizante medicamento durante la cirugía. El resultado primario fue la prevalencia de bloqueo neuromuscular residual en la PACU, que se definió como tener una proporción de tren de cuatro <0,9 y los resultados secundarios fueron factores asociados y complicaciones del bloqueo neuromuscular residual.
Resultados: Se detectó bloqueo neuromuscular residual en 160 (33 %) pacientes y eventos respiratorios agudos en 177 (36,5 %) pacientes. Los pacientes de edad avanzada (edad ≥ 65 años) y aquellos que recibieron dosis adicionales de bloqueadores neuromusculares tenían más probabilidades de tener un bloqueo neuromuscular residual, OR 2,39 y 6,08 respectivamente. El uso de neostigmina, el estado físico ASA III y las cirugías con duración >90 minutos fueron protectores contra el bloqueo neuromuscular residual, OR 0,43, 0,30 y 0,18 respectivamente. No encontramos correlación entre el bloqueo neuromuscular residual y la obesidad o el uso de fármacos bloqueantes neuromusculares de acción prolongada. El bloqueo neuromuscular residual no se asoció con un mayor riesgo estadísticamente significativo de desarrollar eventos respiratorios agudos o una mayor duración de la estancia en la PACU.
Conclusión: La prevalencia de bloqueo neuromuscular residual es alta. El riesgo es mayor entre los pacientes de edad avanzada y aquellos que reciben dosis adicionales de bloqueadores neuromusculares intraoperatorios. El uso de agentes de reversión como la neostigmina y el control de rutina del bloqueo neuromuscular perioperatorio podría contribuir en gran medida a reducir el riesgo de bloqueo neuromuscular residual y sus complicaciones.