ISSN: 2165-7548
Porter Moore C, Craig Huang, Adriana Rodríguez, Robert Wiebe y Jane Siegel
Antecedentes: Los niños con neumonía a menudo son diagnosticados en el departamento de emergencias según los hallazgos clínicos y/o radiográficos. Muchos de estos pacientes pueden ser tratados como pacientes ambulatorios. Sin embargo, los pacientes con neumonía grave a menudo requieren ingreso en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y tienen una morbilidad significativa. No hay datos publicados que ayuden a identificar rápidamente a los niños con neumonía grave que requieren ingreso en la UCI.
Objetivos: Identificar variables clínicas, analíticas y radiográficas que puedan predecir la necesidad de ingreso en UCI.
Métodos: Se realizó un análisis retrospectivo de pacientes de urgencias de 0 a 18 años ingresados en un hospital pediátrico de tercer nivel con diagnóstico de neumonía grave entre 2002 y 2007. Se definió neumonía grave como: empiema y/o derrame pleural. Los pacientes fueron asignados a dos cohortes: 1) admitidos en la UCI y 2) admitidos en la unidad de hospitalización general. Se excluyeron los pacientes con antecedentes médicos significativos. Se recopiló y comparó información demográfica, signos, síntomas, laboratorio y datos radiográficos. Se utilizó la prueba t de Student para comparar las medias de las variables continuas y Chi Square para las variables categóricas.
Resultados: Los pacientes admitidos en la UCI (n=113) tenían síntomas similares en comparación con el grupo que no fue admitido en la UCI (n=180); sin embargo, la cohorte de la UCI presentó un inicio más agudo de la enfermedad con significativamente menos días de fiebre y tos antes de la presentación. También eran significativamente más taquipénicos y taquicárdicos en la presentación. El análisis de laboratorio encontró que los pacientes de la UCI tenían una bandemia significativamente mayor con un recuento medio de bandas de 20,4 (IC del 95 %: 17,0, 23,8) en comparación con 11,8 (IC del 95 %: 9,8, 13,7). Los pacientes hospitalizados con neumonía general tuvieron un recuento medio de plaquetas significativamente mayor en 389 (IC del 95 %: 364 414) en comparación con los pacientes de la UCI en 304 (IC del 95 %: 276, 332), así como valores de ESR en 79 (IC del 95 %: 73, 85) en comparación con los pacientes de la UCI en 304 (IC del 95 %: 276, 332) Pacientes de la UCI a los 58 (IC del 95 %: 49, 67).
Conclusiones: Estos datos sugieren que los niños con neumonía grave con aparición rápida de la enfermedad y bandemia tienen un mayor riesgo de ingreso en la UCI. El inicio más insidioso, los recuentos elevados de plaquetas y la VSG pueden predecir un curso más estable de la enfermedad. El análisis continuo de estas variables puede ser útil en la construcción de un algoritmo de diagnóstico para pacientes con neumonía pediátrica en el momento de la presentación, lo que facilita la detección, el tratamiento y la disposición hospitalaria adecuada antes.