ISSN: 2165-8048
Malek Alexandre, Nasnas Patrice-Eric, Nasnas Roy
Un hombre de 25 años acudió al servicio de urgencias con un mes de evolución de lesiones ungueales graves e inusuales precedidas de ulceración en la boca (Figura 1). El examen físico reveló ampollas periungueales, inflamación y edema de los pliegues ungueales proximales, laterales y posteriores de todas las uñas de manos y pies (Figuras 2 y 3). Notamos varias ampollas de piel flácida en su espalda (Figura 1). Por lo demás, el paciente estaba sano. Trabajó en África durante 2 años.