ISSN: 2165-8048
Sophie I Mavrogeni, Ioannis Nikas, Maria Bonou, George D Kitas
Las espondiloartropatías incluyen un grupo de artritis inflamatorias que abarcan la espondilitis anquilosante (EA), la artritis reactiva, la artritis/espondilitis asociada con la artritis psoriásica (PSA) y artritis/espondilitis asociada con enfermedades inflamatorias del intestino (EII). En las espondiloartropatías, la inflamación puede actuar promoviendo la aterosclerosis o aumentando el efecto de los factores de riesgo CV convencionales. La incidencia de enfermedad cardiovascular (CV) en la EA es del 10 % al 30 % e incluye insuficiencia de la válvula aórtica, aortitis, atrio ventricular (AV) y/o bloqueo de rama. En la artritis psoriásica y la EII, existe un mayor riesgo de eventos cardiovasculares porque los altos niveles de citoquinas promueven la aterosclerosis. Además, la persistencia de la inflamación sistémica favorece el desarrollo de inflamación miocárdica.
La resonancia magnética nuclear (RMN) puede identificar la inflamación en la etapa temprana de las espondiloartropatías, que generalmente ocurre años antes del desarrollo de las lesiones estructurales. Se ha detectado edema de médula ósea (BME) no solo en las articulaciones sacroilíacas, sino también en la columna vertebral, y se considera el sello distintivo de la inflamación. La Resonancia Magnética Cardiovascular (RMC) permite la caracterización funcional y tisular y detecta lesiones cardíacas subclínicas, incluyendo edema, miocarditis, fibrosis subendocárdica difusa y miocárdica, a pesar de la presencia de enfermedad musculoesquelética bien controlada.
Teniendo en cuenta que la radiografía ósea, los hallazgos ecocardiográficos cardíacos y los biomarcadores séricos son marcadores tardíos de afectación ósea y cardíaca, la RM/RMC puede desempeñar un papel indispensable para el diagnóstico precoz de seguimiento de enfermedades óseas/cardiacas en las espondiloartropatías.