Trastornos pancreáticos y terapia
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abstracto

La insuficiencia pancreática exocrina no solo afecta la digestibilidad de los nutrientes y el crecimiento, sino también la composición corporal y los parámetros endocrinológicos: estudio en lechones utilizados como modelo para niños

Anne Mößeler, Teresa Schwarzmaier, Peter Colin Gregory, Marion Piechotta, Martin Beyerbach y Josef Kamphues

El lechón con ligadura del conducto pancreático (PL) es un modelo para la insuficiencia pancreática exocrina (PEI) en niños. La PEI es muy común en niños que padecen fibrosis quística y es de suma importancia ya que el estado nutricional afecta la tasa de supervivencia de estos pacientes. Este estudio tuvo como objetivo comparar el crecimiento y el desarrollo del peso corporal de los lechones PL con (PL+enz) o sin (PL-0) terapia de reemplazo de enzimas pancreáticas (PERT) con los de los controles. Se midió el crecimiento, la proporción del tracto gastrointestinal (GIT; incluida la digesta) y la digestibilidad de los nutrientes en cerdos PL jóvenes. El peso corporal (kg) en la disección difirió significativamente (p<0,005) entre los controles (79,7), PL-0 (51,3) y PL+enz (62,9). La masa GIT representó el 8,17 % del peso corporal en los controles, el 21,1 % en PL-0, mientras que en PL+enz el peso relativo de GIT fue del 12,0 %, lo que difirió significativamente (p<0,01) de los otros dos grupos. La digestibilidad fecal de los nutrientes se redujo notablemente para la grasa y la proteína en PL-0, mientras que la digestibilidad del almidón alcanzó los valores de los controles (p>0,05). PERT aumentó la digestibilidad de grasas y proteínas pero no alcanzó la normalización. Las muestras de digesta ileal tomadas durante la disección indicaron una reducción significativa (p<0,005) en la digestibilidad prececal del almidón en PL-0 (33,4 %) en comparación con los controles (79,7 %). Este estudio demuestra que PEI deterioró el crecimiento, con mejoría, pero sin normalización completa, por PERT. Llama la atención el aumento masivo (p<0,0005) de la masa GIT (21,1% del peso corporal en PL-0 frente al 8,17% en controles), lo que se traduce en una sobreestimación del crecimiento y estado nutricional en PL-0. Los parámetros endocrinológicos como la leptina y el IGF 1 también estaban alterados en los cerdos PL (p<0,05) y se supone que son parámetros útiles para evaluar el estado nutricional en estos pacientes con PEI. Dado que el peso y el IMC pueden resultar en una sobreestimación del estado nutricional en pacientes con PEI debido al aumento del llenado intestinal, es necesario implementar parámetros adicionales para estimar el estado nutricional. La leptina parece ser un parámetro prometedor para caracterizar el estado nutricional, incluso en juveniles – permitiendo una cuantificación indirecta del contenido de grasa corporal. Sin necesidad de ningún equipo técnico en el sitio, este parámetro se puede medir de forma continua durante la consulta de rutina, lo que permite una detección temprana de la desnutrición y una intervención terapéutica temprana.