ISSN: 2155-983X
Shaoqin Sarah Gong
Los nanotransportadores de fármacos han recibido una mayor atención porque pueden mejorar en gran medida las eficacias terapéuticas de las cargas útiles de los fármacos. Las micelas de polímeros convencionales, formadas por el autoensamblaje de múltiples copolímeros de bloques lineales, son uno de los nanoportadores de fármacos más estudiados. Sin embargo, una de las principales preocupaciones con estas micelas de polímeros convencionales es su escasa estabilidad in vivo debido a la naturaleza dinámica del proceso de autoensamblaje. La ruptura prematura de estos nanotransportadores de fármacos durante la circulación puede causar una liberación repentina de cargas útiles en el torrente sanguíneo, lo que puede conducir a una posible toxicidad sistémica y renunciar a sus capacidades de orientación y/o imagen, lo que limita en gran medida sus aplicaciones in vivo. Se han investigado micelas unimoleculares formadas por copolímeros de bloques anfifílicos en estrella de brazos múltiples individuales/individuales para superar este inconveniente. Debido a su naturaleza covalente y su estructura química única, las micelas unimoleculares diseñadas adecuadamente pueden poseer una excelente estabilidad in vivo. Además, debido a su excelente versatilidad química, estas micelas unimoleculares únicas se pueden adaptar con diferentes ligandos dirigidos (p. ej., moléculas pequeñas, péptidos, anticuerpos, nanocuerpos o aptámeros) y/o sondas de imagen (p. ej., fluoróforos, radioisótopos o agentes de contraste de MRI) para lograr la multifuncionalidad. Hemos desarrollado con éxito una serie de plataformas de micelas unimoleculares multifuncionales para teranósticos específicos contra el cáncer (p. ej., cáncer de mama y cáncer neuroendocrino). También hemos diseñado micelas unimoleculares únicas para tratar el glaucoma y las enfermedades vasculares (p. ej., atenuación de la hiperplasia de la íntima) de manera específica. Además, además de las moléculas pequeñas de fármacos, los ARNsi, los péptidos y las proteínas pequeñas también se han administrado con éxito a través de nanopartículas unimoleculares a través de interacciones electrostáticas. En resumen, las nanopartículas unimoleculares son un nanoportador de fármacos prometedor que justifica una mayor investigación para una gama más amplia de posibles aplicaciones.