ISSN: 2329-8936
Waneene C Dorsey
La vía de la proteína quinasa activada por mitógenos (MAPK) ha sido implicada como un sistema de señalización clave que media señales extracelulares a través de una cascada de fosforilación en células de mamíferos. Hay tres niveles distintos en la vía MAPK que son estimulados por diferentes señales de estrés, ERK, JNK y p38. Identificar moléculas de señalización celular como respuesta al estrés es de suma importancia, ya que la transducción de señales proporciona el vínculo necesario entre un estímulo del entorno externo de una célula y los eventos que ocurren entre sus componentes intracelulares. La modulación de biomoléculas en la familia MAPK es un mecanismo de acción clave y tiene el potencial de provocar la progresión, proliferación y diferenciación del ciclo celular. Sin embargo, la aparición del cáncer está influenciada por genes reguladores mutados. Por lo tanto, cuando ocurren mutaciones genéticas, sus productos interactúan con biomoléculas de la vía MAPK. Esta interacción hace que se manifiesten eventos moleculares como la tumorigénesis.