ISSN: 2327-4972
Gómez MM, Manrique J y Chen AF
Las infecciones articulares periprotésicas (PJI, por sus siglas en inglés) son una de las complicaciones más devastadoras después del reemplazo articular total. Un diagnóstico temprano puede mejorar el resultado del tratamiento de la IAP, y los primeros pasos para diagnosticar la IAP a menudo los realiza un médico de familia o un médico general.
Cuando un paciente se presenta con sospecha de IAP, los pasos que se deben seguir se basan en la guía de práctica clínica de la Academia Estadounidense de Cirujanos Ortopédicos (AAOS). Los síntomas clínicos, como el dolor, son la principal queja que alerta a los médicos sobre una posible IAP, junto con otros síntomas como eritema, calor y sensibilidad alrededor de la herida quirúrgica. Estos pacientes deben recibir radiografías de la articulación afectada y se deben realizar pruebas de laboratorio como la velocidad de sedimentación globular y la proteína C reactiva. Los médicos deben evitar activamente comenzar la terapia con antibióticos, obtener imágenes de medicina nuclear, enviar pacientes a enfermedades infecciosas o recetar fisioterapia. Finalmente, los pacientes con sospecha de IAP deben ser derivados a un cirujano ortopédico que pueda establecer el diagnóstico final y realizar el tratamiento adecuado.