ISSN: 2475-3181
Matthew R Kappus, Bryant B Summers, Jennifer S Byrns, Carl L Berg y Julius M Wilder
Presentamos un solo paciente con porfiria aguda intermitente cuya porfiria se trató con éxito con un trasplante de hígado ortotópico. Tenía una calidad de vida muy pobre como resultado de años de síntomas frecuentes de porfiria aguda que se manifestaban como crisis de dolor abdominal. Después del trasplante, los signos clínicos de porfiria se resolvieron como se esperaba. Este caso se suma a un creciente cuerpo de literatura que está ayudando a formular las indicaciones y el momento del trasplante para AIP.