ISSN: 2165-7890
Otto E Rossler*, Lisa-Ruth Vial, Frank Kuske y Niels Birbaumer
Un modelo de teoría de sistemas del funcionamiento del cerebro obtenido en un contexto deductivo-evolutivo se encuentra en segundo plano. Una descripción intuitiva de la transición repentina de un optimizador autónomo con cognición a un “centrado en el otro” Se ofrece modo de funcionamiento. Esta “bifurcación” es altamente no trivial. Presupone una recompensabilidad específica del individuo por la alegría mostrada por el compañero de interacción. Este es el caso si la recompensa experimentada momentáneamente en un lado provoca una recompensa aún mayor en el otro lado y viceversa. En segundo lugar, la presencia de la competencia del espejo en ambos individuos permite que se produzca una retroalimentación positiva a través de todas las recompensas posibles en ambos lados. Este tipo de acoplamiento cruzado conduce entonces a la ocurrencia de un evento de “ver con los ojos del otro.” El evento se puede llamar “personogénesis” porque sólo las personas pueden ver de esta manera. Este modelo implica la predicción de que una “ceguera de la sonrisa” previene la personogénesis. No solo explica el autismo profundo, sino que también permite una terapia causal: una “sonrisa acústica” si lo expresa el compañero de vínculo que brinda cuidado cada vez que se deleita momentáneamente en la interacción, previsiblemente es suficiente. La terapia propuesta es tan simple que puede ser ofrecida por profesionales no médicos y padres comunes. La prueba de fuego de que el método funciona consiste en la predicción implícita de que la misma “terapia personogenética” puede extenderse a otros animales de unión competentes como espejos.