ISSN: 2161-0932
Yesuf Ahmed Aragaw, Mintesnot Mahtemsilllasie y Habtamu Jarso
Introducción: El término ‘Gran multiparidad’ fue introducido por Solomon (1934), quien lo llamó el “multipara peligroso” [1]. Desde entonces, la gran multiparidad ha sido considerada como un factor de riesgo tanto para la madre como para el feto [1-4]. La Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia define la gran multiparidad como el parto del quinto o más recién nacidos y en este estudio la gran multiparidad se define cuando una mujer embarazada tiene cinco o más nacimientos por encima de las 28 semanas de edad gestacional [2]. El objetivo de este estudio es comparar el resultado materno y perinatal en gran multiparidad y baja paridad. En los países en desarrollo, la gran multiparidad es muy común, mientras que en los países desarrollados es rara.
Métodos y materiales: Se realizó un estudio comparativo transversal prospectivo en el Hospital especializado de la Universidad de Jimma en 2015. Se recopilaron datos de 119 grandes multíparas (paridad >= 5) y 238 de baja paridad (paridad 2-4). ) mujeres que dieron a luz en el hospital y los datos se analizaron utilizando el paquete estático de ciencias sociales (spss) 20.3. Valor p<0.05 considerado significativo.
Resultado: Participaron en el estudio 357 mujeres con hijos, de las cuales 125 eran gran multíparas, con una incidencia del 8%. La gran multiparte se asoció con anemia (3,5; 1,5-8,4), condición fetal intraparum no tranquilizadora (3,2; 1,3-8,0) y mortalidad perinatal (5; 1,7-7,4).
Conclusión: La gran multiparte se asoció tanto con la mortalidad como con la morbilidad materna y perinatal. Limitar la paridad podría disminuir la mortalidad materna y perinatal y se debe crear conciencia sobre la planificación familiar tanto en la comunidad como en los centros de salud.