ISSN: 2167-7700
Gerhard Pütz
Los cánceres son una de las principales causas de muerte hoy y lo serán en el futuro. La quimioterapia es una de las principales armas que tenemos en la batalla mal equipada contra esta importante amenaza humana. A pesar de varios inconvenientes, los sistemas de administración de fármacos (DDS) basados en nanopartículas prometen mejorar la quimioterapia contra el cáncer. Desde el comienzo de la “Nanomedicina” por el descubrimiento de los liposomas por Bangham et al. en 1965 [1] hasta el reciente impulso de artículos sobre varios materiales nuevos y estrategias combinadas en la última década, una gran cantidad de agentes quimioterapéuticos se han cargado o encapsulado en diferentes tipos de nanopartículas. Se han probado con éxito muchos enfoques, al menos en estudios preclínicos.