ISSN: 2155-9570
Ahmad Mirshahi, Mahnaz Abdollahian, Alireza Lashay, Abed Namavari, Hooshang Faghihi y Mahdi Nili
Propósito: evaluar el efecto del activador intravítreo del plasminógeno tisular (r- tPA) en la mejora de la agudeza visual y la disminución de la tasa de complicaciones en la oclusión de la rama venosa de la retina (BRVO) y las complicaciones isquémicas en la oclusión de la vena de la retina (CRVO).
Métodos: 10 pacientes con BRVO y 19 pacientes con CRVO isquémica de aparición reciente (de 4 a 30 días de duración) y agudeza visual de <=20/50 recibieron 100 microgramos de tPA por vía intravítrea. La isquemia se definió como un área de falta de perfusión >=10 DD para CRVO y >=5 DD para BRVO. El programa de seguimiento contenía 6 visitas: en el momento de la inyección y 1 semana, 1 mes, 2 meses, 3 meses y 6 meses después. La angiografía con fluoresceína se realizó antes de la inyección y al final del estudio.
Resultados: En el grupo de OVCR isquémica: sólo un ojo (5,6%) desarrolló neovascularización del iris. La media de la agudeza visual inicial aumentó de 1,8400 LogMAR a 1,5333 LogMAR al final del estudio (p=0,009). El coeficiente de correlación de Pearson fue de +0,874 para las BCVA medidas inicial y final. 8 pacientes (44,4%) tuvieron una duplicación del ángulo visual (aumento de 0,3 LogMAR en BCVA).
En el grupo BRVO: 3 pacientes (30%) se clasificaron en el grupo isquémico y después de un seguimiento completo de 6 meses ninguno de los casos (0%) desarrolló neovascularización retiniana, hemorragia vítrea, desprendimiento de retina o endoftalmitis. La media de la agudeza visual inicial aumentó de 1,0710 LogMAR a 0,6100 al final del estudio (p=0,001).
Discusión: La comparación entre los resultados de nuestro estudio y la historia natural de la OVR indica que después de la inyección: hubo una duplicación del ángulo visual en aproximadamente el 10% de los casos. La tasa de neovascularización del iris y glaucoma neovascular se redujo a 1/6 de lo que ocurre sin tratamiento.
Endoftalmitis, desprendimiento de retina y hemorragia vítrea, que se conocen como complicaciones mayores de este procedimiento, no ocurrieron en ninguno de nuestros 29 pacientes.