ISSN: 2329-8731
Gabriel Ånestad, Kirsti Vainio y Olav Hungnes
En 2009, varios países europeos, incluida Noruega, experimentaron un retraso en la propagación del nuevo virus de influenza pandémica A (H1N1) pdm09 después de su aparición inicial en primavera y verano. En la presente comunicación se discute si este retraso se debió a la interferencia del virus con otros virus respiratorios, en particular los rinovirus, y por lo tanto a la formación de ondas epidémicas. Si bien es una mera hipótesis en este momento, la interferencia del virus puede dar una explicación razonable de por qué los brotes de influenza española de 1918 y otras pandemias de influenza, a diferencia de la influenza estacional, tienden a ocurrir en varias olas epidémicas posteriores. Según las teorías de la evolución, es poco probable que los virus epidémicos circulen independientemente unos de otros.