ISSN: 2161-0940
Patel A
La aterosclerosis es una enfermedad vascular inflamatoria que comienza como estrías grasas que subrayan el endotelio de las paredes de las arterias grandes, generalmente coronarias o carótidas. Consiste en la disfunción endotelial, la acumulación de lípidos y colesterol en la íntima desde una edad temprana y el reclutamiento de células inflamatorias a los sitios de daño en la pared arterial. La enfermedad progresa a través de varias etapas, lo que eventualmente resulta en la formación de una placa rica en colesterol. El papel de la angiogénesis en la aterosclerosis ha sido de creciente interés en los últimos 20 años ya que los estudios experimentales no han podido sustentar una relación causal. La angiogénesis implica hiperplasia de los vasa vasorum en las primeras etapas de la aterosclerosis, que se cree que es independiente de la angiogénesis, seguida de neovascularización de la íntima en las etapas tardías de la enfermedad dependientes de la angiogénesis. La angiogénesis aumenta el suministro de oxígeno y nutrientes a la pared de la arteria y apoya el crecimiento inicial de la placa. Una vez que se desarrolla la placa aterosclerótica, se cree que la angiogénesis de la íntima contribuye a las características de una placa inestable, como el adelgazamiento de la cubierta fibrosa, un núcleo necrótico rico en colesterol, infiltración excesiva de células inflamatorias, hemorragia de la placa y mayor riesgo de ruptura de la placa. Esta cuenta analiza la evidencia detrás del papel de la angiogénesis en la aterosclerosis y la inestabilidad de la placa.