ISSN: 2329-6917
Laten Mclish
Objetivo: Determinar la distribución de la leucemia mieloide y la leucemia linfocítica en Jamaica en 2008. Métodos: El estudio incluyó las catorce parroquias. Los datos se obtuvieron del Registro de Cáncer de Jamaica ubicado en el Departamento de Patología de la Universidad de las Indias Occidentales. Los denominadores de población se obtuvieron del censo de 2011 realizado por el Instituto de Estadística de Jamaica. El paquete estadístico que se utilizó para analizar los datos fue Excel. Resultados: Las frecuencias más altas de leucemia mieloide en 2008 se produjeron en el grupo de edad de 40 a 44 años y de 65 a 69 años. No se registró ninguna incidencia posterior de leucemia mieloide después de los 79 años. En Jamaica en 2008, la edad media en la que se diagnosticó leucemia mieloide fue de 47 años. La tasa de incidencia bruta (CIR) para leucemia mieloide para ambos sexos fue de 0,9, 1,3 para los hombres y 0,5 para las mujeres. Por lo tanto, en Jamaica en 2008 la leucemia mieloide fue predominante en los hombres (ratio hombre/mujer, 2,6). La probabilidad de desarrollar leucemia mieloide en todas las parroquias se examinó utilizando la tasa de incidencia bruta (CIR). La probabilidad más alta fue la de alguien que residía en la parroquia de St. Thomas (3,2), seguida de St. Ann (1,7), Kingston y St. Andrew (1,2), St. Catherine (1,0), St. Mary (0,9), Clarendon (0,8), St. Elizabeth (0,7) y Manchester (0,5). Las tasas de incidencia bruta para las parroquias restantes fueron cero. Kingston y St. Andrew se trataron como una sola porque están muy interrelacionadas. En Jamaica en 2008 los casos de leucemia linfocítica fueron esporádicos cuando se consideraron todos los grupos de edad. La aparición comenzó dentro del grupo de 0 a 9 años y después de 80 a 89 años no se diagnosticaron más casos. La edad media de diagnóstico de leucemia linfocítica fue de 46 años. Cuando se consideraron ambos sexos, la tasa de incidencia bruta fue de 0,4. En 2008, en el caso de los hombres, la tasa de incidencia bruta fue de 0,4 y en el caso de las mujeres, de 0,4 (ratio hombre/mujer, 1,0). Por lo tanto, en 2008 no hubo predominio cuando se compararon los géneros. La tasa de incidencia bruta se utilizó para determinar en qué parroquia una persona tenía más riesgo de desarrollar leucemia linfocítica. En orden descendente, una persona tendría más riesgo en Portland (1,2), St. Catherine (0,8), Kingston y St. Andrew (0,5), Manchester (0,5) y Clarendon (0,4). Conclusión: Para reducir los efectos de estos cánceres, la educación es de suma importancia en lo que respecta a la predisposición familiar, así como a la exposición a agentes químicos como insecticidas, radiación, etc. También se deben realizar pruebas de detección.