ISSN: 2168-9857
Nikolaos Papoutsoglou y Thiruchelvam N
Las lesiones testiculares son raras debido a la movilidad de los testículos y su posición anatómica entre los muslos, lo que les ofrece protección. Representan solo un pequeño porcentaje de las lesiones traumáticas del tracto genitourinario. Etiológicamente podemos categorizar el traumatismo testicular en cerrado o penetrante. El tratamiento puede ser conservador o quirúrgico. Un hematocele significativo indica ruptura de la túnica vaginalis testis y debe tratarse con exploración y reparación quirúrgica. La decisión del tratamiento se puede tomar con la ayuda de una ecografía en tiempo real o, a veces, resonancias magnéticas y tomografías computarizadas de los testículos. La función hormonal se mantiene normal en la mayoría de los casos, pero el estado hormonal debe controlarse en casos complicados, que afectan la fertilidad y pueden requerir reemplazo hormonal.