ISSN: 2165-7548
Stephanie Carreiro, Adam Darnobid, Sean Rhyee y Stacey Weisberg
Antecedentes: el sulfuro de hidrógeno (H2S) se ha convertido en un método de suicidio que ha ganado popularidad en todo el mundo en los últimos años. Los medios tradicionales incluían un automóvil bien sellado en un lugar remoto. La tasa de consumación del suicidio fue muy alta y rara vez se establece contacto con pacientes vivos. Discusión del caso: una mujer de 35 años fue descubierta en su apartamento después de un intento de suicidio en una habitación del apartamento, utilizando H2S. Una respuesta de múltiples niveles incluyó médicos de emergencia desde el inicio del caso, tanto en la escena como en el centro receptor, asesorando sobre seguridad en la escena, problemas toxicológicos y manejo. El paciente requirió intubación en el campo y atención de apoyo, pero finalmente fue dado de alta del hospital neurológicamente intacto. Ni los socorristas ni los transeúntes se vieron gravemente afectados. Discusión: Con cuidados rápidos en escena y cuidados intensivos tempranos y agresivos, este paciente sobrevivió sin déficit. Los socorristas y los médicos de urgencias deben conocer este nuevo método de autolesión y las implicaciones para los pacientes, el personal de urgencias y los transeúntes.