ISSN: 2155-9570
Divya Srikumaran, Hyeck-Soo Son, Jefferson J Doyle, Beatriz Muñoz, Walter J Stark, Russell L McCally y Albert S Jun
Propósito: Evaluar una posible relación entre la agudeza visual y la opacidad y el grosor corneal después de la queratoplastia endotelial con pelado de Descemet (DSEK).
Métodos: Revisión retrospectiva de pacientes intervenidos de DSEK con al menos 3 meses de seguimiento postoperatorio. Se midieron la agudeza visual corregida con las mejores gafas (BSCVA) y la paquimetría ultrasónica, y se realizó una exploración Pentacam para cada ojo del estudio. Las imágenes de Pentacam se analizaron para determinar los niveles de dispersión de la luz en la superficie, el estroma del huésped, la interfaz y el injerto, que se usaron como marcadores de la opacidad corneal. El injerto central del donante y los espesores centrales generales también se midieron con el Pentacam. Se calcularon los coeficientes de correlación de Pearson para cada uno de los parámetros y el BSCVA postoperatorio para identificar cualquier asociación potencial. Se realizó un análisis multivariable utilizando un modelo de regresión lineal que predijo la agudeza visual para cada uno de los parámetros significativos del análisis univariable ajustando la edad del paciente y la agudeza preoperatoria.
Resultados: se informan los resultados de 41 ojos de 36 pacientes. Los coeficientes de correlación de Pearson mostraron una correlación positiva estadísticamente significativa entre la BSCVA posoperatoria y la edad (r = 0,36, P = 0,020), la dispersión interfacial-estromal (r = 0,44, P = 0,004) y la dispersión interfacial-injerto (r = 0,36, p=0,022). No se encontró correlación entre BSCVA y la dispersión de la superficie (r = 0,04, P = 0,78), la dispersión del estroma del huésped (r = -0,15, P = 0,35), la dispersión de la interfaz media (r = 0,18, P = 0,25) o la dispersión del injerto ( r=-0,14, P=0,38). Se observó una tendencia hacia una correlación positiva entre BSCVA y el grosor central del injerto del donante en el diagrama de dispersión exploratorio, pero esto no fue estadísticamente significativo (r = 0,27, P = 0,085). Se realizó un análisis de regresión lineal que controlaba la edad y la agudeza preoperatoria para los parámetros anteriores y la correlación entre BSCVA y la diferencia entre la interfaz y la dispersión estromal del huésped se mantuvo estadísticamente significativa (β=0.00375, P=0.0195).
Conclusión: Los ojos con mejor BSCVA después de DSEK tienden a tener menores diferencias entre la dispersión de la luz de interfaz y del estroma. Sin embargo, no se encontró relación entre BSCVA y las otras medidas de dispersión de luz corneal o espesor corneal. Se podrían realizar estudios prospectivos adicionales utilizando técnicas como la microscopía confocal in vivo para complementar los métodos actuales para validar el impacto relativo de las diferencias regionales en la opacidad corneal en los resultados de agudeza visual después de DSEK.