ISSN: 2161-0940
Derar Refaat Derar* y Ahmed Ali
Es un hecho claro que el sistema reproductivo de los animales domésticos está sujeto a cambios rítmicos a lo largo de la vida del animal y que los hacen únicos entre otros sistemas corporales. La íntima relación entre las membranas fetales y el concepto representa la piedra angular de los cambios dinámicos durante el período de gestación. Los estrógenos, la progesterona y otros esteroides ováricos ejercen un estricto control sobre la función del hipotálamo y la hipófisis. La orientación se produce entre el momento de la fijación y la aparición de las formas irregulares. Se cree que los factores que interactúan durante la orientación son porciones gruesas (tres capas) y delgadas (dos capas) de la pared del saco vitelino; invasión asimétrica por engrosamiento de la pared uterina turgente superior a cada lado de la inserción mesometrial; y la acción de masaje de las contracciones uterinas. La interacción de estos factores da como resultado que la porción más gruesa de la pared del saco vitelino (polo embrionario) gire a una posición ventral (antimesometrial). Se puede sugerir que la orientación es un fenómeno único del concepto equino. Se ha sugerido mucha especulación sobre su significado, pero el hecho de que todavía no está claro cuál es el papel exacto de este fenómeno durante la vida temprana del feto equino.