ISSN: 2329-6488
Christina L Ruby, Laura N Marinos, Catherine F Zisk, Jiawen Zhang, Kaitlyn N Palmer, David J Bunion, Jacob D Dietzel y Natalie M Verbanes
Es común entre los jóvenes estadounidenses mezclar alcohol (etanol) con cafeína, lo que se asocia con patrones de consumo de dosis altas/alta frecuencia y riesgos de salud mucho mayores que el alcohol solo. Sin embargo, pocos estudios hasta la fecha han investigado la neurobiología de los fármacos utilizados en combinación. La creciente evidencia sugiere que la interrupción de los ritmos circadianos (diarios, 24 h) es clave para la fisiopatología de la adicción, aunque los mecanismos subyacentes son poco conocidos. Varios determinantes clave de la vulnerabilidad a la adicción al alcohol, como la sensibilidad a la intoxicación, la respuesta a la recompensa e incluso el hecho de beber, varían durante el día. Aquí, investigamos el efecto de la cafeína sobre la ataxia inducida por etanol en ratones en seis intervalos de 4 h durante el fotociclo de 24 h. Observamos una clara variación diurna en la ataxia causada por el etanol (1,5 g/kg), con un nadir en la sensibilidad que se produce temprano en el día (fase de reposo). La coadministración de cafeína (7,5 mg/kg) hizo avanzar este patrón diurno y, sorprendentemente, eliminó el punto más bajo (p. ej., aumento de la sensibilidad al etanol a primera hora del día). Nuestros datos respaldan la idea de que puede haber un ritmo circadiano en la descoordinación motora inducida por etanol y demuestran que el efecto de la cafeína en esta medida depende de la hora del día en que se administran los dos fármacos.