ISSN: 2375-4435
wendy ashley
Este artículo explora la experiencia de la autora al navegar por factores de interseccionalidad invisibles, juicios erróneos de otros y descubrir su propia resiliencia en el proceso. El autor considera el binomio activismo y distancia respetuosa como respuestas a los problemas sociales, ofreciendo la conexión como estrategia para potenciar los derechos humanos dentro de la comunidad negra. Se proporcionan estrategias personales y profesionales para promover la recuperación y la curación; utilizando un método de investigación cualitativo de autoetnografía. La interseccionalidad se refiere a los rasgos de diversidad que hacen que cada uno de nosotros sea único y el correspondiente poder y privilegio (o falta de ellos) asociados con la combinación de factores. Manejar el impacto de los elementos circunstanciales que cambian la vida, como el duelo, la enfermedad, la discapacidad o el trauma, es un desafío, ya que a menudo son invisibles y no reconocidos, con frecuencia están ausentes al nacer y representan un cambio de la identificación interseccional anterior. Cuando las personas atraviesan una coyuntura de estrés o crisis y se enfrentan a un cambio de identidad, son cada vez más vulnerables, lo que hace más significativo el papel de quienes brindan apoyo personal o profesional. A pesar de la conexión con ciertas comunidades, la capacidad de acceder a las fortalezas y la resiliencia de uno está influenciada por la forma en que uno experimenta estos elementos en gran medida invisibles. Como resultado, la interseccionalidad no es estática, brinda oportunidades para definirse y redefinirse a lo largo del ciclo de vida según cómo se negocien estas experiencias.