ISSN: 2165-8048
Dominique Exume, Anna Posner, Jaime B. Long
La infección recurrente del tracto urinario (RUTI, por sus siglas en inglés) es un problema común entre las mujeres adultas. La causa de la RUTI es multifactorial, con muchas características patógenas y del huésped que actúan como factores de riesgo para el desarrollo. Cuando un paciente desarrolla un patrón de infecciones recurrentes del tracto urinario, el reconocimiento rápido permite un diagnóstico preciso, un tratamiento adecuado y medidas preventivas eficaces. El diagnóstico de RUTI requiere la aparición de 2 ITU comprobadas por cultivo en 6 meses, o 3 en 12 meses. Cuando se reconoce RUTI, está indicada la evaluación con una historia clínica y un examen exhaustivos. En ocasiones, se justifican otras pruebas de diagnóstico. Las guías actuales para el tratamiento de la cistitis aguda no complicada proponen regímenes de antibióticos de primera línea, que se aplican a mujeres con RUTI, con ciertas excepciones debido a resistencias, condiciones médicas o alergias. La prevención puede implicar el tratamiento tópico con estrógenos para mujeres en un estado hipoestrogénico, la profilaxis con antibióticos o el uso de otras herramientas antibacterianas. Se están realizando más investigaciones para encontrar estrategias novedosas para prevenir la RUTI.