ISSN: 2161-0940
Wilson IB Onuigbo
Hacia 1889, ya se sabÃa que la realización de autopsias puede ayudar a seguir los pasos de la Naturaleza. Ahora bien, ¿qué puede ser más fácil que esta práctica en casos en los que tÃpicamente está involucrado el pigmento, es decir, el melanoma? Por lo tanto, se buscó una revisión histórica de la biologÃa de las células pigmentarias. Desafortunadamente, aunque se propuso iniciar el estudio con los primeros estudios realizados antes de 1900, no se arrojó luz sobre este problema en particular. En consecuencia, se buscó la apelación entre los patólogos cuyas reuniones se informaron en las Transacciones de su Sociedad de Londres. Comenzaron en 1846-48, mientras que el nombre, melanoma, comenzó a usarse en 1838. Por lo tanto, el problema del mapeo anatómico del hÃgado colonizado se abordó en las glándulas históricas hasta 1899.