Hassan IH El-Sayyad, Soad A Khalifa, Afaf AE Fahmy, Eman A El-Shahary, Ehsan M A Ibrahim
Recientemente, varios estudios han documentado la presencia de residuos de acrilamida en alimentos fritos como papas fritas fritas, snacks etc., debido a la reacción de Mallard por su contenido en glucosa y aminoácido asparagina. El presente estudio se llevó a cabo para ilustrar el efecto de la ingesta dietética materna de papas fritas fritas en el paladar blando, las papilas linguales y el duodeno de los recién nacidos en desarrollo (1, 7, 13 y 21 días) en comparación con el tratamiento con acrilamida. Se utilizaron ochenta ratas albinas Wistar preñadas dispuestas en tres grupos. Estos son el control, patatas fritas fritas (dieta estándar al 50 %) y tratamiento con acrilamida (10 mg/kg de peso corporal). La experimentación del tratamiento con acrilamida o la ingesta dietética de papas fritas fritas se llevó a cabo desde el día 6 de gestación hasta el día 21 después del parto. Se sacrificaron neonatos de las edades mencionadas y se examinó histológicamente el paladar blando, la superficie del dorso de la lengua y el duodeno, mediante microscopía electrónica de barrido y el daño del ADN mediante el uso del ensayo cometa y la fragmentación del ADN. Los presentes hallazgos revelaron varias deformaciones de las papilas linguales y los cuerpos de las papilas gustativas en el paladar blando. Los neonatos tratados experimentalmente exhibieron anomalías histológicas como disminución de la cornificación de las papilas filiformes, degeneración de las papilas gustativas apicales de las papilas fungiformes y papilas gustativas deformadas en el paladar blando. La capa mucosa del duodeno presentaba un marcado daño de las células de revestimiento epitelial, reducción de las células caliciformes y atrofia comparativa de las vellosidades. A nivel de microscopio electrónico de barrido se detectó una aparente atrofia de las papilas fungiformes y una disminución de la queratinización de las papilas filiformes. El daño del ADN de cadena simple y doble se observó notablemente en las células linguales y duodenales.
Los autores finalmente concluyeron que la ingesta dietética materna de papas fritas fritas causó un daño marcado en el paladar blando, las papilas linguales y el duodeno de los recién nacidos que coincide con el daño en el ADN.